El rumbo preciso de Paco de Lucía

La Bienal de Flamenco de Sevilla recuerda al guitarrista como a un revolucionario influido por el impresionismo y el jazz MONTERO GLEZ Paco de Lucía, en un concierto de Madrid en junio de 2010. / SANTI BURGOS Cada vez que se ponía a tocar la guitarra, Paco de Lucía celebraba el disparate de la vida desde lo más profundo. Tras su muerte, en febrero pasado, la Bienal de Flamenco de Sevilla le dedica su edición de este año con un simposio coordinado por el periodista Juan José Téllez. Entre otras cosas, se tratará la figura de Paco como la de un revolucionario de la música. No es descabellado tratar como revolución su música, pues Paco de Lucía no sólo se conformó con interpretar el espectro sonoro, sino que lo transformó sin perversiones comerciales, devolviendo la decencia a un folclore que permanecía sumido en un complejo de inferioridad con respecto a otras músicas. Hasta que llegó Paco, la guitarra flamenca era instrumento que servía como adorno para acompañar al cante, poc...